Seguimos con la serie de retos que tenemos que afrontar sobre los Desafíos de la edición de una forma más concisa. Durante el mes de febrero te presentamos las tres charlas sobre edción a las que puedes acudir o ver. En esta ocasión hablamos sobre el por qué de la segunda charla del 20 febrero: Autopublicación: El autor, nuevo empresario editorial
Reto 2. El autor se empodera
En esta charla haremos un recorrido por la historia reciente de la edición, ligada por completo a la revolución informática y al fenómeno de la democratización de la cultura. Nos encontramos ante del reto de hacer libros para un público cada vez más formado, que tiene muy claro lo que no quiere y que crea constantemente nuevas formas de acceder a los libros y de ejercitar la lectura.
Junto los cambios que ha experimentado el lector, tenemos a un perfil de autor renovado. Cada vez más personas sienten la necesidad de comunicar su mensaje mediante una publicación. Son activos en la cultura, se mueven en las redes, crean y comparten contenido cada día. Esto les permite conocer a su público, sus necesidades y lo que quieren leer. La comunidad social se autorganiza y establece contacto para crear una oferta ajustada a la demanda.
La revolución informática posibilitó la aparición de la autoedición y más recientemente la posibilidad de publicar con nuevos sistemas productivos alternativos al offset que permiten realizar tiradas asequibles sin tener que realizar una costosa inversión. La informática también ha cambiado la sociedad, los canales de comunicación y la forma de acceder a la cultura.
La evolución tecnológica ha terminado produciendo un cambio de paradigma que desplaza el peso de la iniciativa lectora hacia el público. Internet y las redes sociales permiten que la sociedad intercambie información y se convierta en un valor activo, en un agente más de la cultura.
En este caldo de cultivo el fenómeno de la autopublicación muestra cómo el nuevo paradigma plantea otras necesidades, retos diferentes y que obligan a los agentes tradicionales del sector a reajustarse a estos cambios. En la autopublicación siguen cabiendo todos los agentes, editores, traductores, autores, ilustradores, maquetadores, impresores, incluso la figura empresarial de la editorial es posible, encarnada en editorial de autopublicación. Pero no cabe duda de que ahora todos ellos deben establecer nuevas formas de interactuar porque su oficio sigue siendo necesario pero su rol ha cambiado. Es necesario analizar estos cambios y crear los modelos de trabajo para ajustarse a la demanda y a los requerimientos del sector.
Para afrontar este reto debemos redefinir los papeles y conocer las nuevas formas de publicación y distribución. No solo los cambios en el sistema productivo, sino también los conflictos que ha generado su irrupción. Los problemas de sobreproducción y la dificultad de visibilizarse son dos de los grandes desafíos que el sector debe afrontar en un futuro próximo y que los autores y editores deben sortear para poder hacer efectiva la finalidad de todo proceso de publicación: las ventas.
¡Seguimos trabajando!
